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Extracto:
El señor Flores expresó que: le parecía que la falta de policía [urbana] en la ciudad, se debía también a la indolencia de los 5 celadores, ya que estos se la pasaban en la vinatería, por lo que no informaban a los regidores de sus cuarteles acerca de los problemas que existían. Estos celadores, con el pretexto de cuidar a los presos no hacían más que dormir y perder el tiempo, por eso el señor Flores opinó que: sólo dos vigilen a los presos, y los demás trabajen en la calle recogiendo los cerdos que abundan y se coloque un corral, donde los dueños de los cerdos acudieran por ellos, tras pagar su multa, evitando con ello, que otros se apropien de los animales. El presidente expresó que: los regidores deben obligar a los celadores a cumplir con su trabajo, exigiéndoles informe de asuntos como el del aseo de los miércoles y los domingos. Además, los cerdos se deben colocar en el corral del señor Olascoaga, quien recibirá las multas y las pasará a la tesorería.
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