Extractos de las Actas de Cabildo del Ayuntamiento de Toluca

Número de acta: 2077
Fecha:
1 de enero
Año: 
1851 
Ramo/Tema :
Vida Institucional del Ayuntamiento
Asunto :
Alocución del alcalde saliente
Tipo de acta: 
Actas capitulares
Extracto:
Dijo el alcalde saliente que: el ayuntamiento durante el periodo que ha fenecido, ha procurado cumplir con sus diversas y numerosas obligaciones en medio de las más aciagas circunstancias... Lo primero que llamó la atención fue la escasez de fondos que no bastaba para cubrir las atenciones más urgentes del municipio, por lo tanto se activó el cobro de contribución destinada al ramo de escuelas, dictando diversas providencias que afectaron al tesorero municipal la que ha dado por resultado que sólo una pequeña parte se esté adeudando por los contribuyentes, dependiendo principalmente de la dificultad que se presenta para plantear un nuevo impuesto por la falta de un censo perfecto, así como de que cuando ya comenzaba a percibirse el fruto e los trabajos emprendidos, se presentaron nuevas dificultades nacidas de la contribución general conocida con el nombre de capitación. Se encargó también de procurar el aumento en los demás ramos de propios ya arbitrios, dirigiendo a la prefectura diversas excitativas en aquellos que depende de ella como el impuesto de las municipalidades del partido para el fomento de cárcel. A pesar de esto se notaba un deficiente considerable y para cubrirlo se propusieron nuevos arbitrios al supremo gobierno del Estado que merecieron su sanción. Con estos nuevos rendimientos se puede decir que los fondos ya alcanzaban para cubrir el presupuesto de este año y están aun en estado de recibir aumento tanto porque apenas comienzan a plantearse como porque los reglamentos deberán variarse según fuere necesario por lo que acreditase la experiencia. Entre los ramos de propios, el capital de 6000 pesos que dejó Don Lázaro José de Castro para la fundación y manutención de una escuela y que antes se hallaba impuesto en la hacienda de San Isidro, se transfirió sobre el nuevo mercado que se está construyendo con el mismo capital. Por orden superior, la obra quedará concluida a mediados de este año, sin que haya necesidad de abandonarla, puesto que las cortas cantidades que falten a más de los 6000 pesos que referidos, y de poco más de dos mil que se recogieron de algunos vecinos de esta población, notables por su patriotismo desinteresado, pueden cubrirse muy bien con el producto de la venta de terrenos baldíos, de lo cual se ha encargado el mismo gobierno quien para activar la construcción del mercado, se hizo cargo personalmente de presidir la mayor parte de las juntas que se celebran con la asistencia de una comisión del ayuntamiento. Concluido el mercado permitirá aumentar considerablemente los fondos municipales con el arrendamiento del local y arbitrios recaudados en los tianguis serán percibidos con más regularidad y la ciudad se habrá embellecido con uno de esos edificios que no pueden faltar en las poblaciones civilizadas.. Empedrados. Se han hecho mejoras considerables, encontrándose con ello multitud de calles que antes no los tenían que los necesitaban urgentemente. Ornato, un bando del ayuntamiento para pinta de fachadas de edificios, la mayor parte lo hizo. Alumbrado: ha mejorado notablemente aumentándose el número de faroles y habiéndose perfeccionado los aparatos respectivos como ha sucedido con los que iluminan el portal. Este se encuentra muy hermoseado por el cielo raso que costearon los mismos vecinos por solicitud de la comisión respectiva. Alameda: que se hallaba en abandono absoluto s atendió especialmente por algunos vecinos, enrejados que cercan varias porciones de terreno que deberán cultivarse. Se puso la entrada principal. Cárcel: Se construyeron cuarenta cadenas con el trabajo de los mismos presidiarios. Instrucción primaria: establecimiento de dos escuelas una de niños y otra de niñas. Cólera: Todas las tareas del ayuntamiento fueron ejecutadas en su mayor parte durante la época funesta en que invadió la epidemia a esta población. El ayuntamiento entonces comenzó a poner en planta las diversas medidas que con anticipación había adoptado para precaver sus estragos, socorrer a los epidemiados pobres y sepultar gratuitamente a los necesitados que fueron víctimas de tan asoladora plaga. No se limitó la corporación a esto sólo sino que procuró la asistencia de los epidemiados por medio de sus capitulares, habiéndose distinguido algunos por la asistencia eficaz que prestaron personalmente a un sin número de enfermos haciendo esfuerzos y sacrificios de todo género que la población jamás olvidará. Ilustre ayuntamiento: Los cuerpos municipales tienen derechos incuestionables a la gratitud de los pueblos. La historia nos enseña que su establecimiento fue una de las causas que eficazmente Contribuyeron a sacar a la Europa de la abyección e ignorancia en que la tenían sumergida el sistema feudal. Este había degenerado en opresión; los nobles con usurpaciones intolerables habían convertido a los súbditos en esclavos, y la condición de los llamados hombres libres no era más lisonjera que la de aquellos; oprimidos estaban no sólo los labriegos y campesinos sino hasta los moradores de las ciudades y aldeas que dependían de los barones cuya protección debían comprar, además de sufrir los defectos de una jurisdicción arbitraria, Los habitantes estaban privados de los derechos que concede la naturaleza al linaje humano, no podían de por vida ni por testamento, disponer de los frutos de su industria, tampoco se les permitía nombrar tutores para sus hijos menores, si querían casarse debían comprar con oro la licencia de su señor, así que principiaban un pleito no les era dado componerse amistosamente porque así privaban al señor, en cuyo tribunal se seguía la causa, del derecho de sentencia que le tocaba; se les exigía sin linaje de compasión todo género de servicios por lo regular humillantes y penosos, miles acciones injustas y reglamentos absurdos, ponían trabas en las ciudades al espíritu de industria, cuyos adelantos eran sofocados por las rígidas y tiránicas máximas de una aristocracia militar. Todos estos graves males fueron desapareciendo a medida que las ciudades fueron constituyéndose en cuerpos municipales. La ingratitud parece que por desgracia es inseparable del corazón humano con esa consideración puede darse una explicación satisfactoria de la grita que se han levantado contra esas corporaciones y cuyos ecos van llegando al Santuario de las leyes. Yo veo con sentimiento que los pueblos, olvidados de los beneficios inmensos que deben a las municipalidades, se levantan contra ellas confirmando nuevamente la triste verdad de que siempre los beneficiados son enemigos declarados de sus benefactores, dando lugar con su conducta a que los hombres, por su propio interés, se abstengan de prestar su protección a sus conciudadanos, temerosos de buscarse enemigos y perseguidores. No negaré que los ayuntamientos no han producido en lo general los benéficos efectos que eran de esperarse, algunos pueblos no prosperan en los ramos encargados a su cuidado, sino antes bien retroceden en ellos, pero para buscar el remedio no se ha de destruir una institución venerable por su antigüedad por los benéficos efectos que según la historia produjo a los pueblos y que tienen su apoyo en la autoridad de los escritores respetables. Atribúyase el mal a las personas que han ocupado las sillas municipales, y las leyes que se han dado para gobierno de esos. Cuerpos: Hombres sin luces y sin costumbres, han asaltado esos puestos y su conducta no ha contribuido para su descrédito personal, sino por desgracia ha recaído sobre la institución, que en sí misma no tiene cosa que no sea respetable y digna del amor público. Los graves negocios que han llamado de preferencia la atención del legislador le han impedido ocuparse de la reforma de las leyes municipales y los defectos y vicios que hay actualmente deben atribuirse en gran parte a que está abierta la puerta para incurrir en ellos. Toda legislación debe contener restricciones que al hombre honrado lo fortifiquen en su conducta de honor y que al perverso lo contenga dentro de los límites del deber. Esa reforma debemos de esperarla de las luces y patriotismo del actual H. Congreso, Parece que ya es tiempo de que dirija su mirada a ese poder que está en contacto inmediato con los pueblos y cuyo buen arreglo basta por sí solo para hacer gran parte de la felicidad pública. Vosotros señores, a quienes el voto de confianza de los pueblos ha llamado a estos asientos de honor, tened presente que vuestra principal obligación es restituir a las corporaciones municipales el respeto y amor de los pueblos y dar con vuestra conducta una prueba palpable de lo benéfico de la institución, cuando el nombramiento recae en personas dignas de tan honrosos puestos. Haced que mejoren los ramos de la administración municipal, sin salir jamás de las órbitas de vuestras atribuciones, ocupados del negocio cuyo conocimiento no sea cometido en las leyes a los cuerpos municipales; y estad seguros de que concluida vuestra misión os acompañara en el curso de vuestra vida la satisfacción de haber hecho el bien del municipio, y de haber restituido a los ayuntamientos la respetabilidad que se merecen-. Pasaron los entrantes y saliente a la capilla del Tercer orden donde asistieron al Te Deum y Preces que ahí se cantaron en debida acción de gracias. 

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