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Extracto:
El prefecto dijo que: había inobservancia en los reglamentos de policía por parte del vecindario, pues ni en las fábricas ni en la colocación de ventanas guardaban las reglas descritas para uno y otro. Y que debiendo subsanarse este mal con la vigilancia de los regidores en sus respectivas secciones lo excitaba para que la procurasen. Barrera: que se les había encomendado puramente a aquellos y por las actuales circunstancias lo exclusivo a la policía de salubridad, según lo dispuesto y acordado en la Junta tenida ante el gobierno, por lo que desearía que ya que el prefecto facultaba a los regidores encargados de las secciones para que vigilaran en lo general de todo lo relativo a los reglamentos de policía, lo expresase oficialmente, puesto que aunque esta facultad se les concedía en el bando de buen gobierno, este aun no se aprobaba. El prefecto: que era bastante con el acta presente, que los regidores adquiriesen por ella la facultad que se les concedía, expresando en conclusión haber notado que las secciones de que se había hablado, eran comprensibles únicamente al casco de la ciudad y no se hacían extensivas a los barrios, pueblos, haciendas y ranchos de que constaba la municipalidad, de manera que estos, aquellas y los otros se hallaban al cargo únicamente de los alcaldes auxiliares, careciendo por lo mismo de la inmediata vigilancia del ayuntamiento con notable perjuicio de la policía, previniendo por lo mismo se reformasen las secciones a fin de dividirlas de manera que comprendieran todas las poblaciones que formaban el municipio, para proporcionar por este medio hacer extensivo el cuidado del ayuntamiento a toda la municipalidad que le estaba encomendada.
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