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Extracto:
El Sr. Eulogio Barrera dice que: como miembro de la comisión nombrada en cabildo del día 29 de enero, dio cuenta con una comunicación de la prefectura de esta ciudad en que aparece inserta otra del Secretario de Relaciones del Gobierno del Estado, por las que se manifestó el deseo del gobernador de procurar por cuantas maneras le fuera posible mejorar y embellecer las poblaciones del estado y muy particularmente la capital, había proyectado la edificación de sus mercados, para hermosear la ciudad y que el municipio tuviera un recurso para sus fondos, el mercado se situaría en parte del cementerio del convento de San Francisco. Para que se facilitara la obra, el gobierno dispuso que una comisión del Ayuntamiento se acercara a él. La corporación también debía saber que el gobierno había proyectado la plaza del mercado con un dinero que el Sr. Escandón proporcionaba sin gravamen de rédito. Pero el ayuntamiento hizo notar que el gobierno resolvió la construcción del edificio sin contar para ello con el cuerpo municipal. Pero no habiendo surtido efecto el proyecto del gobierno, se principió la obra con el auxilio de algunas cantidades que el gobierno reunió de donaciones voluntarias. Pero también se dispuso se invirtieron 6000 pesos que la Hacienda de San Isidro reconocía a favor de la Escuela pía de la ciudad, de primeras letras fundada por Don Lázaro José de Castro tratando de la redención de este capital con el deudor, Don Luis Macotela, por conducto de su padre Ignacio Macotela.
En este momento se pidió el ayuntamiento su intervención en el negocio por conducto de una comisión que se mandó nombrar a instancias del gobernador, por tener el Ayuntamiento la escritura de fundación. Pero la hacienda de San Isidro ya había pasado ya a otro dueño. Se había construido poco aun y ya se llevaban gastados 2400 pesos.
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