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Extracto:
El señor Licea dijo que: el gobierno no había resuelto la consulta que se le hizo sobre el cobro del impuesto a las cargas que entran a la ciudad y no pareciendo justo que de los causantes unos la satisfagan y otros no, sin que se les pueda compeler a ello, opinaba su señoría porque se suspendiera dicho cobro hasta recibir la resolución del gobierno. El señor Martínez de Castro dijo que: mientras resolvía el gobierno, que no se suspendiera el cobro por ser de sumo interés a los fondos, con especialidad en las circunstancias presentes. El señor Estévez: dijo que: comprendiéndose en él las pensiones impuestas a las pulquerías, boticas y otras casas de comercio, una vez suspenso, debería precisamente arreglarse lo relativo a ellas o se daba un golpe mortal a los fondos municipales, obstruyendo uno de sus principales arbitrios. Proposición: Se formaría una comisión del ayuntamiento que hablaría con el gobernador sobre la imperiosa necesidad de que el cobro de la pensión impuesta a las cargas que entran a esta ciudad, recabando de su excelencia y de pronto alguna medida que lo haga efectivo sobre los causantes sin excepción o lo suspenda del todo. ( la comisión se formó con los señores: Martínez de Castro, Hernández y el síndico primero).
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