|
Extracto:
Nota de la prefectura, que dice que: señala los puntos en que deberán situarse los vigilantes de que habla la prevención novena, de las publicadas el día de ayer y que se cumpla con lo mandado en ella. El presidente y Martínez de Castro expusieron que: había varias dificultades que se presentaban para el cumplimiento de ella, y particularmente, que no se decía qué clase de gente debería emplearse en este servicio, pues si se trataba de los vecinos y por lo mismo de un servicio gracioso, no era fácil obligarlos a él y más cuando lo estaban al de rondas que apenas podían desempeñar desarmados y en medio de los peligros que se anuncian. El presidente y Martínez de Castro siguieron diciendo que: Por otra parte, pagar esos vigilantes por cuenta de los fondos, no lo dice la orden y en verdad que el gasto sería inútil, porque nadie podría responder de la vigilancia al comisionado, uno sólo no sería bastante y, sobre todo, colocado un hombre a la altura de una torre y de noche bastante obscura, no es imposible distinga en los caminos ni en la población misma algunos de los incidentes de que habla la citada prevención. Ocupar, en fin a los celadores dependientes de este ayuntamiento, sería abandonar o debilitar otros objetos de interesante cuidado, como son la cárcel el hospital, pero, como en el caso del ayuntamiento, no debe observar y sí cumplir con lo mandado, el presidente indicó que: sería bueno ponerse de acuerdo con el prefecto para cumplir con la repetida prevención. Entonces se formuló y el cabildo aprobó la proposición siguiente: -se faculta al presidente, para que poniéndose de acuerdo con la prefectura arregle y cumpla la orden que contiene la nota que se ha dado cuenta.-.
|
