El señor Pliego dijo que: lo habían visto los vecinos del callejón del Cenizo para que se les componga aquel del empedrado para la comodidad del vecindario y que están prontos a contribuir para el efecto.
El presidente: que se saque una lista de vecinos de la expresada calle que se ofrecen a contribuir firmando la cuota que cada uno señale para que se les exija tan luego como concluyan los trabajos de los sentenciados en la Plazuela de la Merced, pues que a más del que presentar los presos siempre se necesita que sean dirigidos por algunos otros maestros albañiles que dirijan la obra ya estos se les han de satisfacer sus jornales y que imponiéndose la corporación de sus ofertas podrá dictar sus providencias para que sea obsequiada la solicitud de aquellos vecinos.
