En cabildo se expone que o aceptan el nombramiento de custodios de pobres las siguientes personas: Ignacio Valdés, Agustín Torres y José Agreda. Ellos dicen que pagarán en vez de servir de manera personal. No se admitió la renuncia de los señores Antonio Mañón y Miguel Robles, debido a que: la del primero por la muy perentoria razón en que la funda y la segunda por no ser una absoluta excusa la que manifiesta puesto que expone que si llegado el caso sus enfermedades no le impidieran desempeñar las funciones que competan a los custodios de pobres, y puesto también que aquel caso desempeñara el suplente que para esta sección se nombre a aquél si él enfermase.}