El señor Hinojosa dijo que: después de haber manifestado que uno de los auxiliares que iba en jefe de una de las rondas la noche ayer, habido sido atropellado y lastimado por el sargento de policía Cipriano Romero, que mandaba una patrulla sin más razón que la de habérsele pedido el santo que no presentó, echó mano de su espada y con ella tiro diversos machetazos al propio auxiliar, causándole varias contusiones y concluyendo con desarmar a la ronda, que careciendo el ayuntamiento de armas para habilitar bastante a los ciudadanos que se prestaban a formularlas y no accediendo el gobierno a la compra que de ellos se le propuso y considerándose el peligro en que se ponía a los ciudadanos y aun a los mismos capitulares, por la falta de armas para hacerse respetar, formuló la siguiente proposición: -mientras el ayuntamiento de esta capital no tenga las armas necesarias para proveer bastante a los ciudadanos que desempeñan las rondas estas no se ejecutarán, comunicándose así al superior gobierno por conducto de la prefectura-. Declarada urgente se aprobó.}